Diciembre, las grandes marcas lanzaron sus mensajes de Navidad en un año especialmente complicado para todos, el año del COVID. Algunas optaron por obviar el contexto, otras, por afrontarlo directamente; pero casi ninguna buscó la tercera opción: Dar la vuelta a la situación. Desde el equipo de Mi Querido Watson creamos una emotiva campaña basada en el hecho de que hace nueve meses, cuando fuimos confinados, nos cambió la vida. Pero, como sucede siempre, a unos más que a otros. Y es que, en pleno auge de la pandemia, hubo quienes apostaron por la vida cuando todo era oscuridad y, por eso, en enero llegaron los bebés que regalaron la alegría que tanto necesitábamos. Llegaron los Hijos del Confinamiento. “Hijos del confinamiento” es la idea central de una campaña lanzada el 15 de diciembre de 2020 con acciones en Digital, Redes Sociales y Relaciones Públicas compuesta por dos vídeos teaser, una pieza audiovisual donde personas reales expresan sus sentimientos y reflexionan sobre el nuevo mundo en el que vivimos y una web en la que todos los futuros padres y madres pudieron subir sus fotos de embarazo y mensajes para darnos ánimos a los demás. A partir del 1 de enero de 2021, se abrió una segunda galería que se llenó de fotos de recién nacidos, los auténticos Hijos del Confinamiento. Una campaña con la que ganamos cuatro premios en el festival internacional de agencias independientes Wina. Un oro en la categoría de COVID Film, un bronce en la categoría COVID Digital y dos menciones.